Margarita Robleda inspira a estudiantes de Bycenes a transformar el mundo desde las infancias
Con un “¡Croac!” para captar la atención de su público desde el inicio, Margarita Robleda Noguel ejemplificó ante las y los futuros docentes la magia de reinventarse y hacer algo distinto para cautivar a las nuevas generaciones.
“Cuando me dijeron que venía a la Normal, me dio muchísimo gusto, porque quiero hablar de la importancia de su vocación y decirles ‘¡despierten, se nos está acabando el mundo!, contamos con ustedes’”, expresó.
Robleda Noguel, escritora de cuentos infantiles, cantante y conferencista, tuvo un encuentro con docentes en formación en la Benemérita y Centenaria Escuela Normal del Estado de Sonora “Prof. Jesús Manuel Bustamante Mungarro”, como parte de la 41 Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil.
Durante su charla, la autora originaria de Mérida, Yucatán, felicitó al estudiantado por elegir la docencia como profesión pues, dijo, a través de ésta tienen la posibilidad de cambiar el mundo, pero para ello deben usar su creatividad y los pocos o muchos recursos con los que cuenten.
“La pandemia nos vino a sacudir mucho. Estamos hartos, estamos enojados, estamos desesperanzados. Ahora, bien, ¿qué hacemos con eso? Yo estoy aquí porque estoy enojada, y estoy cambiando mi enojo y transformándolo. ¿Qué hago para construir ese mundo con el que sueño para todos nosotros? Haciendo lo que hago”, dijo.
Con adivinanzas, rimas y hasta canciones en distintos géneros, Margarita Robleda invitó a las y los estudiantes de la Bycenes a reflexionar sobre la responsabilidad de su futuro rol, porque para muchas niñas y niños no hay figura más especial que la de su docente.
La escritora, quien no tuvo la oportunidad de estudiar la universidad, aseguró que ahora asiste a muchas instituciones educativas y comparte sus experiencias gracias a que ha encontrado su propia voz, lejos de buscar ser igual que el resto.
“Yo me sentía muy mal cuando me decían eso, porque me decían desadaptada, subversiva, infantil, rebelde… Hasta que descubrí que tenían razón, ¿cómo voy a estar adaptada a un mundo tan injusto y tan hipócrita? Soy desadaptada, subversiva, infantil. Se necesita ser muy valiente para ser distinto; lo fácil es ser del montón”, aseguró.